Mantenimiento y cuidado
El cuidado adecuado de sus instrumentos quirúrgicos mejorará su longevidad y función. A continuación se muestran diferentes procesos de limpieza, esterilización y mantenimiento para guiarlo a través de sus técnicas.
Pautas para alargar la vida de tus instrumentos quirúrgicos.
Limpie y seque completamente sus instrumentos lo antes posible después de cada uso, prestando especial atención a las juntas, bisagras y cualquier lugar donde haya contacto de metal con metal.
Manipule sus instrumentos con delicadeza y cuidado.
Utilice sus instrumentos para el propósito previsto.
Guarda tus instrumentos con protectores de puntas y colócalos siempre de manera que no se toquen entre sí.
LIMPIEZA
Los instrumentos quirúrgicos finos deben limpiarse inmediatamente después de su uso. La sangre o las soluciones salinas que se dejan en los instrumentos durante cualquier período de tiempo pueden iniciar rápidamente una acción corrosiva. El tiempo, la temperatura y la agitación juegan papeles importantes en el proceso de limpieza. El tiempo afecta la eficiencia de las soluciones de limpieza, ya que la mayoría son efectivas después de un cierto período de tiempo. Las soluciones de limpieza a temperaturas más altas dan como resultado una mejor limpieza. Durante la limpieza manual o ultrasónica es útil
aflojar cualquier recuerdo quirúrgico. Antes de cualquiera de los procedimientos siguientes, enjuague sus instrumentos con agua corriente tibia para eliminar toda la sangre y el tejido. Los instrumentos se pueden limpiar manualmente o por ultrasonidos, pero siempre:
LIMPIEZA MANUAL
Asegúrese de que todos los instrumentos estén visiblemente limpios y libres de manchas, frotándolos con cuidado para eliminar toda la sangre y los tejidos.
Enjuague bien los instrumentos con agua destilada, prestando mucha atención a las juntas y bisagras, ya que en estas áreas se puede acumular material no deseado.
Seque sus instrumentos al aire por completo y use una lata de aire comprimido para eliminar el agua de las juntas y bisagras. Luego guárdelos sólo en ambientes limpios y secos.
LIMPIEZA ULTRASÓNICA
La limpieza ultrasónica es el método de limpieza más eficaz. Las ondas sonoras vibrantes crean burbujas del tamaño de una micra en la solución que crecen con la presión alterna. Cuando las burbujas alcanzan un tamaño determinado, colapsan creando una fuerza que desaloja la suciedad y las partículas, incluso en las grietas más pequeñas.
NO recomendado para instrumentos delicados y micro.
Siga las pautas del fabricante para obtener instrucciones específicas y tiempos de ciclo de limpieza.
Los instrumentos deben procesarse durante el tiempo de ciclo completo recomendado.
Coloque los instrumentos en la posición abierta en el limpiador ultrasónico.
NO permita que instrumentos con hojas afiladas toquen otros instrumentos.
• NO coloque metales diferentes (inoxidable, cobre, cromado) en el mismo ciclo de limpieza.
• Asegúrese de que todos los instrumentos estén completamente sumergidos.
Una vez finalizado el ciclo de limpieza ultrasónica, enjuague bien los instrumentos para eliminar toda la solución de limpieza ultrasónica.
Seque bien los instrumentos con una toalla limpia.
Utilice un lubricante en aerosol en las bisagras para minimizar el riesgo de corrosión y mantener la funcionalidad.
ESTERILIZACIÓN
Es importante que los instrumentos estén libres de todo rastro de materia orgánica o de otro tipo antes de la esterilización.
ESTERILIZACIÓN POR VAPOR/AUTOCLAVAMIENTO
El proceso de autoclave utiliza calor húmedo (o vapor) bajo presión para la esterilización. El vapor utilizado debe ser de agua destilada y libre de toda impureza.
Lubrique todos los instrumentos que tengan alguna interacción de metal con metal, como; tijeras, gubias, portaagujas, hemostáticos y retractores. NO utilice WD-40 ni otros lubricantes industriales.
Los instrumentos se pueden esterilizar en autoclave individualmente o en juegos.
NO bloquee los instrumentos durante el autoclave. Esto evitará que el vapor alcance las superficies de metal con metal y las esterilice, y la expansión del calor durante el autoclave puede causar grietas en las áreas de las bisagras.
NO sobrecargue la cámara del autoclave ya que esto puede dificultar la penetración del vapor.
Coloque una toalla en el fondo de la cacerola para absorber el exceso de humedad durante el autoclave. Asegúrese de que la toalla no tenga residuos de detergente y que tenga un pH neutro si se sumerge en agua.
Al final del ciclo del autoclave (antes del ciclo de secado), desbloquee la puerta del autoclave y ábrala ligeramente. Ejecute el ciclo de secado durante el período de tiempo recomendado por el fabricante del autoclave.
Tenga en cuenta: si la puerta del autoclave se abre completamente antes del ciclo de secado, entrará aire frío en la cámara, lo que puede provocar condensación en los instrumentos. Esto provocará manchas de agua en los instrumentos.
ESTERILIZACIÓN CON PERLAS CALIENTE
Recomendado por su rapidez y comodidad cuando se requiere la esterilización de puntas de instrumentos o hojas. El esterilizador Hot Bead no utiliza gases, llamas ni productos químicos peligrosos. Reflejos:
Montaje de mesa de trabajo.
Solo se requieren 20 segundos de contacto para garantizar que sus instrumentos estén libres de patógenos y contaminantes microbianos.
Las perlas alcanzan una temperatura de 240˚ - 270˚C (464˚ - 518˚F) en 15-20 minutos de calentamiento.
ESTERILIZACIÓN CON ÓXIDO DE ETILENO (ETO)
Este método se recomienda para instrumentos que no toleran altas temperaturas o humedad (por ejemplo, catéteres, cánulas, etc.). Este es un proceso que consta de 4 variables principales; concentración de gas, humedad, temperatura y tiempo.
ALMACENAMIENTO
Los instrumentos quirúrgicos deben almacenarse adecuadamente en un ambiente limpio y seco. Es muy recomendable utilizar protectores de puntas y estuches para instrumentos para evitar posibles daños a sus instrumentos.
OXIDACIÓN
Todos los instrumentos quirúrgicos de acero inoxidable FST se fabrican con acero inoxidable de grado médico bajo estrictas normas europeas. Es muy importante cuidar adecuadamente sus instrumentos para prolongar su vida útil.
Aunque el acero inoxidable es resistente a la corrosión, aún puede oxidarse o mancharse si se manipula incorrectamente. En condiciones desfavorables, los instrumentos pueden oxidarse porque el acero inoxidable expuesto a manipulaciones físicas, térmicas o químicas puede perder algunas de sus propiedades inoxidables.